Miradas en un café.

 Día /12/05/2023

Escribí hace años un relato llamado Miradas en el metro. Añado de Badalona. En la web enfemenino, y gustó bastante. Era, es, un relato de dos personas que cruzan su mirada, mientras transcurre el trayecto. Pero una de ellas se baja antes. Cosas mundanas.

Hoy me ha sucedido algo parecido. Sobre las 7 horas de la mañana me levanto y salgo a la calle a tomar café. Es una cafeteria con terraza exterior que da a la rambla, junto al polideportivo. No suele estar demasiado concurrido. Me siento dentro ya que hacia algo de frio a esa hora de la mañana. Entra una muchacha de unos 20 años, tal vez algo más. Saluda a la dueña, me mira y me saluda con una sonrisa azul verde. Con una mirada suave, tierna. No he podido eludir el hechizo de su mirar, y hemos terminado riendonos como tontos. Incluso la dueña he visto sonreir. La muchacha de mirada tierna y bella, se giraba de vez en cuando para mirarme, y claro, me pillaba mirandola. Rubia, no demasiado alta. No paraba de moverse por el escaparate. En esto me ha recordado a mi mismo, que hago igual. No puedo, o no quiero estar quieto. Siento la vida empujandome a bailar con ella, con la vida, conmigo mísmo. Siento esa energia en mi alma, en mi cuerpo. Necesito jugar con la vida.

Al salir, ya que debia tomar el autobús para recoger la metadona de la semana. Nos hemos despedido con cierta pena. Me ha sonreido y he visto esa mirada dulce, ese acariciar con los ojos tu alma, alegra al espiritu que la habita. Ha sido un adios languido. Un a dios de aquellos que esperan volver a encontrarse un día. Tengo cierto problema a la hora de recordar rostros. Pero no me ocurre igual con lo que estos rostros transmiten. Con sus emociones, que puedo sentír. El año pasado me ocurrió igual con tres chicas. Me corta el hecho que son tan jovenes. Deben ver en mi al padre que desearon, quien sabe. Pero reconozco bastante exito con las chicas jovenes. Ya tuve que quitarme de encima a unas adolescentes, que me seguian por la calle diciendome cosas. Ya escribí sobre esto.

Joder y también, que me siento culpable. Mi corazón aún se estremece con tú nombre, Silvia. Hoy no tengo claro que estuvieras en el despacho analitico. Aunque he creido oir a Marta decir al entrar, está Ángel. Y el trato de Javier, ha cambiado y vuelve a ser frio, distante. Muy distante. Conozco mi alma, el alma humana. A pesar de todo, sé que Silvia, mi amor, me quiere tanto como yo a ella.  Por eso no me he rendido. Por eso me limito a devolver una mirada, una sonrisa. Pero me marcho. Al igual que ya apenas recuerdo tu voz. Apenas recuerdo tu rostro. Sin embargo no puedo olvidar tu manera de ser, de comportarte, tu eres todavia una niña, si pudieras verte como yo te veo. Las cosas que siento al tenerte cerca, tu preocupación, sufres. Sé que sufres, y ahora, sufres por mí. Y por ti misma. Tienes tantas ganas de verme como yo a ti. 

Y en dos ocasiones, tú, me me miraste de esta manera. Con esa dulzura juvenil. Sin embargo, el tiempo, esa cosa extraña. Hace motivar el olvido. Se olvida aquello que nos hace sufrir, nos hace llorar. Aunque aquello se ame con todo el ser. Seran dos años casi, sean los años lo que sean. Un trueno lejano acaba romper el siseo de la estatica, agitando el espacio, alargandose, como un quejío, un gemido de la naturaleza envolvente. Como mi sentimiento explota de dolor al no verte. Si crees que así te olvidaré, te estas haciendo y me estas haciendo daño, para no conseguir nada. Hasta que no te vea en al menos 4 ocasiones. No cejare hasta verte, y tú lo deseas. No nos hagas daño mi amor. Sabes muy bien cúanto te amo. 

Pero me siento ahora solo. Deseo compartír mi alegría, mi visión de la vida, las cosas que he aprendido y sigo aprendiendo. Es mi momento para tener un hijo. No digo que lo quiera tener. Me refiero a que sé qué hacer con su vida, en que puedo convertirlo. En una persona libre y responsable. Iniciarlo en los secretos de la existencia, hasta dónde creo conocer. En definitiva, criar un ser feliz, sin complejos, libre, bondadoso con quien deba serlo, fiel y comprometido con la verdad, con ser mejor cada día, con avanzar y buscar la realidad, sentir la vida con el corazón. Templar la mente y esperar al espiritu.

  Un abrazo y un beso muy grande a todos. 

                        Ángel